El helado ha pasado de ser un postre tradicional a convertirse en un espacio de innovación culinaria. Desde recetas familiares centenarias hasta propuestas vanguardistas, estas diez heladerías destacan por su pasión artesanal, creatividad y calidad de ingredientes.

Birds of Paradise (Singapur) – Helados botánicos con sabores como crisantemo blanco o hojicha con sal marina, reconocidos por la Guía Michelin.

Fazekas Cukrászda (Budapest, Hungría) – Premiada mundialmente por su helado de pistacho con frambuesa y creaciones únicas como feta con hierbas.

The Creamery (Ciudad del Cabo, Sudáfrica) – Compromiso ético y uso de productos locales en sabores clásicos y de temporada.

Vivoli (Florencia, Italia) – Una de las heladerías más antiguas, célebre por su crema tradicional y su affogato.

Veneta Gelato Italiano (Valencia, España) – Más de 100 sabores creados por Maurizio Melani, con premios internacionales por innovaciones como la “galleta de la abuela”.

MINIMAL (Taichung, Taiwán) – Única heladería con estrella Michelin, donde la ciencia y la gastronomía se unen en menús degustación.

Szypula 1974 (Baborów, Polonia) – Herencia familiar y sabores premiados como yogur griego con miel y nueces caramelizadas.

Gelupo (Londres, Reino Unido) – Conocida por su frescura y combinaciones como ricotta con cereza amarga o helado en brioche caliente.

Angelo Brocato (Nueva Orleans, EE.UU.) – Tradición siciliana con más de un siglo, famosa por sus spumoni y torroncino.

Cadore (Buenos Aires, Argentina) – Ícono cultural de la ciudad, con recetas italianas y sabores emblemáticos como dulce de leche o pistacho.

Estas heladerías demuestran que el helado artesanal es un viaje de sabores que combina historia, innovación y pasión en cada cucharada.