
El Reino Unido exige la fortificación con ácido fólico en harinas no integrales para 2026, con el objetivo de prevenir 200 defectos de nacimiento al año y mejorar la salud pública.
El gobierno del Reino Unido ha anunciado nuevas regulaciones que exigen la adición de ácido fólico a la harina de trigo no integral, una medida que se espera que prevenga aproximadamente 200 casos de defectos congénitos graves al año. A partir de 2026, los molineros y productores de harina estarán obligados a incorporar este nutriente esencial, que ayuda a prevenir defectos del tubo neural (DTN), como la espina bífida. Esta medida legislativa representa un paso significativo para abordar los problemas de salud pública asociados con la deficiencia de ácido fólico, especialmente para las mujeres embarazadas.
¿Por qué el ácido fólico es un nutriente esencial?
Los defectos del tubo neural (DTN) son una de las principales causas de enfermedades debilitantes en los bebés, siendo la espina bífida una de las más graves. El ácido fólico, un tipo de vitamina B, es crucial para el desarrollo fetal temprano, especialmente para prevenir defectos en el cerebro y la columna vertebral. Sin embargo, la deficiencia de ácido fólico sigue siendo preocupante en el Reino Unido, donde contribuye a un número significativo de casos de DTN cada año.
Se espera que fortificar la harina con ácido fólico, una práctica ya existente en países como Australia y Canadá, reduzca estas afecciones en un 20 por ciento en todo el Reino Unido.
El cambio legislativo incorporará el ácido fólico a la lista de otros nutrientes obligatorios en la harina del Reino Unido, como el calcio, la niacina, la tiamina y el hierro. Esto no solo contribuirá a reducir los defectos congénitos, sino que también supondrá un ahorro estimado de 20 millones de libras en atención médica y un aumento de 90 millones de libras en la economía durante la próxima década.
“Transformar la atención de la enfermedad a la prevención es una de las principales ambiciones de nuestro Plan de Salud Decenal, mientras trabajamos para que nuestro NHS esté preparado para el futuro”, comentó Andrew Gwynne, Ministro de Salud Pública y Prevención. “Estas medidas son una intervención sencilla y eficaz para mejorar la salud de los bebés, brindándoles el mejor comienzo en la vida”.
Una revisión del Reglamento sobre el pan y la harina de 1998
Las nuevas regulaciones forman parte de una revisión exhaustiva de las Regulaciones del Pan y la Harina de 1998, realizada por el Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales (Defra) en cooperación con las administraciones descentralizadas y el Departamento de Salud y Asistencia Social.
Actualmente, el NHS recomienda que las mujeres que intentan concebir tomen suplementos de ácido fólico tres meses antes de la concepción y durante el primer trimestre, una recomendación que seguirá vigente junto con las nuevas regulaciones sobre la harina.
“La fortificación obligatoria reducirá el número de bebés afectados por espina bífida… ¡Marcará una gran diferencia en la vida de muchas personas!”